Cuando cae en tus manos un libro como ‘Poeta Chileno’ de Alejandro Zambra (Santiago de Chile, 1975), leer se convierte en una fiesta, en un gozo.
Sucede poco, de hecho, es altamente inusual, pues lo habitual es leer mucha vulgaridad, muchos lugares comunes y muchos, demasiados, libros aburridos, que hacen de la lectura un sufrimiento, una tortura, una de las experiencias más desagradables que hay. No me pidáis que dé nombres.
En cambio con ‘Poeta Chileno’ Ricardo Zambra consigue que uno, quien esto escribe en este caso, quiera leer más sobre este autor chileno radicado en México (¿o Méjico?).
Detrás de la ironía que hay en muchas de sus páginas, de su amable humor, nunca sangriento ni sarcástico, en ‘Poeta Chileno’ hay un verdadero amor hacia la poesía – y no sólo la chilena-, lo que no le impide mostrar algunas de las miserias que acompañan a los vates del país andino, y que, sin duda, se pueden extrapolar a los bardos del resto del mundo.
Esta novela se puede dividir en cuatro grandes partes: conocemos a Gonzalo, aspirante a poeta chileno; asistimos a su relación adulta con Carla ( y el hijo de ella, un chaval llamado Vicente; nos reencontramos con ese mismo Vicente cuando, ya en sus dieciocho años, aspira a ser poeta -chileno- y donde conoce al que será el primer amor de su vida, la joven americana Pru, y la parte final, es un reencuentro -y también una despedida.
Durante las 421 páginas de esta novela, Alejandro Zambra va a desarrollar cuestiones como la vocación de la escritura, la necesidad de reconocimiento en pugna con la voluntad de independencia, el termómetro del éxito o el fracaso, la extraña mezcla de entendimiento y competencia que caracteriza a los miembros de una misma generación, las peculiaridades de una vida dedicada a un asunto improductivo como la literatura, y el del sentido comunitario, de pertenencia a un país, gremio, generación, género, clase social o familia, entre otros.
Léeros este ‘Poeta Chileno’ de Alejandro Zambra.
| Editorial: Anagrama Páginas: 421 Año: 2020 |
